La creación y el mantenimiento de sitios web se conoce como desarrollo web. Este trabajo se realiza en segundo plano para que un sitio web tenga un aspecto asombroso, cargue rápidamente y funcione correctamente para que la experiencia del usuario sea óptima.
Un sitio web puede clasificarse de dos formas:
- Frontend: Es el componente que el usuario va a visualizar. En consecuencia, está estrechamente vinculado tanto a la interfaz de usuario (UI) como a la experiencia de usuario (UX).
- Backend: Es área donde se interactúa directamente con el servidor, puesto que aquí es donde se genera el código de la estructura del sitio. Sigue gestionando las bases de datos, las actualizaciones, la accesibilidad y las modificaciones del sitio en segundo plano.
Etapas
- Defina el perfil del proyecto
El primer paso para crear un sitio web es sentar las bases de lo que necesita, lo que incluye que defina el objetivo del proyecto, el público al que va dirigido, qué se le pide al negocio o empresa, qué se puede hacer o buscar, cuál es la personalidad de la marca que se quiere transmitir, entre otros elementos cruciales.
En este punto se debe recopilar la información necesaria para establecer cada etapa del proyecto. Se incluye la investigación de mercado, el análisis de la competencia y la investigación de los consumidores. A partir de ahí, elija la estructura del sitio web y la estrategia de contenidos que mejor se adapten a los objetivos del proyecto.
La organización y disposición de los componentes que formarán cada página del sitio. Es necesario que elija los colores que se utilizarán, la colocación del logotipo, el tipo de letra para las barras, los títulos, los menús y los cuerpos de texto, las imágenes y los vídeos, la versión móvil y para otros dispositivos, así como las interacciones principales que tendrá el sitio, con la aportación del cliente y la marca.
Aquí debe especificar el contenido del sitio web teniendo en cuenta las consideraciones SEO, como todos los banners, bloques de información y textos de las secciones. Dado que tanto el diseño como los contenidos trabajan en conjunto para que el sitio sea funcional.
Una vez considerado lo anterior, es hora de plasmar sus ideas en un lenguaje de programación y un marco de trabajo. Para adaptar un sitio web, se empieza por el wireframe, o diseño general de las páginas. La funcionalidad del sitio, la configuración SEO, la base de datos, el rendimiento y el tiempo de carga, las pruebas de código, la ciberseguridad y otros factores relevantes también se deciden en esta fase. Tenga en cuenta que puede usar la herramienta React.
En esta etapa del desarrollo del sitio web, se trabaja tanto en el frontend como en el backend para garantizar la funcionalidad efectiva del servidor, así como la interfaz y la comunicación entre todos los componentes que conforman el sitio web.
- Revise y pruebe la funcionalidad del sitio web
Una vez creada la programación, hay que revisar a fondo la funcionalidad del sitio web, teniendo en cuenta las especificaciones de diseño y asegurándose de que los contenidos son precisos y funcionan según lo previsto.
Después de haber probado la programación del sitio, así como su funcionamiento, diseño y contenidos, debe subir su sitio web a Internet.
Envíe los archivos al servidor elegido por el cliente para su publicación. A partir de ese momento, los internautas podrán acceder oficialmente al sitio. Si el sitio web es para una empresa, es crucial que incorpore un software de análisis para obtener métricas y datos sobre el comportamiento de los usuarios, en particular de las acciones de compra, cumplimentación de formularios, chats y otras actividades.
Una vez que el sitio web esté en funcionamiento, evalúe su rendimiento, busque áreas que puedan mejorarse y esfuércese por optimizar todo lo que pueda a todos los niveles, ya sea en el frontend o en el backend. Incluso esta evaluación ayuda a señalar posibles mejoras en el contenido o el diseño.
- Realice un mantenimiento continuo
Esta es una de las tareas más importantes porque afecta al tiempo que un sitio web permanecerá en línea. Si no se solucionan los posibles fallos del sitio web, muchos usuarios pueden decidir no volver como consecuencia de la frustrante navegación. Por lo tanto, preste atención al rendimiento de cada página de la aplicación en línea.